Es sabido que Tesla innova constantemente, desde el software de sus coches hasta la química de las baterías que los alimentan. Y una solicitud de patente recientemente publicada nos sirve de prueba, las innovaciones de Tesla llegan hasta los metales usados para fabricar sus coches. Al usar aleaciones de aluminio desarrolladas por la empresa, por ejemplo, Tesla podría dar paso a una nueva clase de coches eléctricos increíblemente resistentes y más baratos de producir.
La patente, titulada «Die Cast Aluminum Alloys for Structural Components«, describe una aleación de aluminio que es extremadamente resistente y dúctil. La aleación de aluminio no requeriría un procesamiento posterior, lo que permitiría a la empresa mejorar sus costes de producción.
En la descripción de la patente, Tesla señala que las aleaciones comerciales de aluminio fundido, como las que se utilizan en los chasis de los vehículos eléctricos, deben ser resistentes y dúctiles a la vez.
Si se fabrican bien, las piezas fundidas pueden producirse de forma rápida y fiable, y deberían mantener bien sus propiedades estructurales. Sin embargo, las aleaciones que no se pueden fundir bien dan lugar a desgarros en caliente, lo que provoca problemas.
Tesla destacó que numerosos componentes estructurales fabricados con aleaciones de aluminio pueden requerir hoy en día procesos como el tratamiento térmico, que mejora la resistencia, la dureza, la ductilidad y la resistencia a la corrosión. Estos procesos garantizan la calidad, pero también requieren grandes gastos de capital, tiempos de procesamiento prolongados y posibles pérdidas de rendimiento.
Por esto, Tesla ha pensado que sería preferible producir aleaciones de aluminio con un alto límite elástico y suficiente ductilidad, sin necesidad de tratamiento térmico.
noticia de ecoinventos.com