Este martes la luz tocará los 700 euros MWh. “Su actividad está en serio riesgo” alerta el sector.
El pánico vuelve a las fábricas españolas, que se están viendo obligadas a parar su producción por el precio inasumible de la luz. La siderúrgica Megasa es uno de los primeros nombres que se van conociendo entre las compañías que han tenido que dejar de trabajar debido a la tormenta energética que ha desatado la invasión a Ucrania por parte de Rusia.
Desde el pasado viernes, 4 de marzo, esta empresa asentada en el municipio coruñés de Narón ha suspendido su actividad. Además, la dirección ha emplazado al comité de empresa a un encuentro desde las 12: 00 horas de este martes en las instalaciones industriales para estudiar la actual situación de escalada de precios en el suministro eléctrico. Megasa no ha querido dar detalles de su situación a los medios. “Nuestra política es no hablar con la prensa” aseguran.
Megasa está catalogada como empresa electrointensiva debido a la cantidad de energía eléctrica que utiliza para transformar chatarra en acero corrugado de barra, en rollo salvaje y alambrón, en un amplio rango de calidades.
Megasa cuenta con otra empresa en Narón, Megamalla, emplazada en el polígono industrial de Río do Pozo, dedicada a la fabricación de malla electrosoldada de acero, cuya producción procede de acero corrugado laminado en caliente, en barra o bobina.
A lo largo de los últimos meses, Megasa ya solo ha venido produciendo durante las noches y los fines de semana, en los momentos en los que el precio de la electricidad era más barato. Diversos medios de comunicación también han publicado que ArcelorMittal también ha paralizado su planta de Olaberría, de momento, por un día.
La escalada energética ya obligó a muchas plantas del país a cerrar por lo que llamaron la “ruina” de la subida de la luz.
“Desde hace días, muchas de ellas se están viendo obligadas a parar su actividad unas horas, a parar algún horno o a dedicarse a trabajos de mantenimiento -que se hacen en vacaciones- porque no les sale rentable seguir produciendo con estos precios de la luz”, explicaba hace unos meses el director general de la Asociación de Empresas con Gran Consumo de Energía, AEGE, Fernando Soto, a Libre Mercado. “
De nuevo, desde (AEGE) alertan de la situación límite de las empresas. “Las industrias electrointensivas españolas sufren el encarecimiento de su suministro eléctrico por la escalada de precios del gas natural y de los derechos de emisión que con el impacto de la guerra en Ucrania ha supuesto precios eléctricos en marzo superiores a los 540 €/MWh, con horas a 700 €/MWh, nunca vistos en nuestro mercado. En industrias tan sensibles al precio eléctrico y con estos niveles, su actividad está en serio riesgo dada su alta exposición al precio del mercado diario y al no disponer de la mayoría de las medidas regulatorias que tienen sus competidores europeos” avisan.
Para aliviar la situación, AEGE solicita al Gobierno “medidas de urgencia similares a las de otros países europeos como Francia, Alemania, Italia, Portugal… Ante la ausencia de ofertas de las eléctricas de contratos bilaterales a precios previos a la crisis energética, el Gobierno tendría que convocar las subastas de energía de tecnología inframarginal (nuclear, hidráulica y renovables), recogidas el RDL 17/2021, y adicionalmente ofrecer la energía del RECORE a un precio regulado”. Para AEGE “urge que esas medidas se adopten ya para salvaguardar la competitividad de nuestra industria electrointensiva, la economía y el empleo que representan. No se hizo en el último trimestre de 2021 y no podemos esperar más tiempo. Además, reclamamos otras medidas como la exención del 80% del peaje de transporte eléctrico, la máxima compensación del CO2 indirecto, estimada en 450 millones de euros para 2022, y poner en marcha un nuevo servicio sustitutivo de la interrumpibilidad, como han hecho en Portugal”.
Noticia de Libre Mercado