El 56,3% de los edificios en España se construyeron antes de 1980, y sólo se rehabilitan 30.000 al año.
La Comisión Europea exige que para 2050 todo parque edificado esté libre de emisiones. En España hay 9,7 millones de viviendas que necesitarían una reforma para estar a la altura, pero actualmente apenas se rehabilitan 30.000 viviendas al año. El Gobierno quiere dar un giro copernicano y llegar a la cifra de 300.000 pisos rehabilitados al año, pero para eso hará falta animar con ayudas e incentivos a los propietarios.
España pase de rehabilitar 30.000 a 300.000 pisos al año. El objetivo es triple: mejorar la eficiencia para adaptarse a los estándares energéticos de la Unión Europea, poner a funcionar a pleno pulmón el ladrillo, uno de los sectores más intensivos en empleo, para reactivar la economía y reducir el consumo de combustibles fósiles para ser menos dependientes de la energía comprada a otros países.
En total, el Gobierno gastará 3.420 millones de euros entre ayudas y deducciones. El montante apenas supone un 4,75% de los 72.000 millones que España recibirá de Bruselas en forma de ayudas, y sin embargo podría llegar a movilizar el equivalente al 18,75% del maná europeo: inyectará 13.500 millones de euros en la economía y creará 188.000 puestos de trabajo, según estimaciones del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana.
¿EN QUÉ CONSISTEN LAS AYUDAS QUE DARÁ EL GOBIERNO?
Con un desembolso de 3.420 millones de euros, el Gobierno se hará cargo del coste de hasta el 100% de las obras de rehabilitación de barrios, edificios o viviendas. En el caso de barrios, se primarán áreas vulnerables económicamente, y las ayudas podrían llegar hasta el 100% si se logra una reducción suficiente del gasto en energía no renovable. Cuando se trate de edificios enteros, serán las comunidades de vecinos quienes reciban los fondos, que cubrirán entre un 40% y un 100% de la inversión, para dedicarlos sobre todo a elementos envolventes (fachadas o cubiertas), calderas comunes o instalaciones fotovoltaicas. La financiación será mayor o menor dependiendo de la eficiencia lograda.
Habrá también subvenciones del 30% cuando se rehabiliten elementos aislados de viviendas o edificios, como por ejemplo el cambio de ventanas. Este porcentaje se sumaría a las subvenciones integrales.
En cuanto a las deducciones, los propietarios o comunidades de vecinos podrán beneficiarse de deducciones en el IRPF por obras en vivienda habitual. Si es sólo un propietario, tendrá una deducción del 20% si reduce un 7% su demanda en climatización; y del 40% si la reducción del consumo alcanza el 30% o logra una certificación energética A o B. Si las obras se llevan a cabo en un edificio, los propietarios de las viviendas del edificio podrán disfrutar de una deducción del 60% si reducen al menos un 30% el consumo de energía no renovable o logran una calificación energética A o B.
- ¿Cuál es el procedimiento para solicitar las ayudas? En el caso de las deducciones en el IRPF, bastará con aplicar la deducción por obras de mejora en vivienda habitual (o propiedad alquilada para vivienda habitual) en la declaración de la renta. Para solicitar las subvenciones, los propietarios y comunidades de vecinos deberán acudir a las comunidades o ayuntamientos, que son las administraciones encargadas de repartir los fondos. Dado que las ayudas públicas se aprueban con posterioridad a la ejecución de la obra, lo más probable es que la comunidad de propietarios necesite solicitar una financiación privada. Esto significa que, de forma simultánea o posterior a la solicitud de las ayudas, deberán acudir a una entidad financiera. Otra vía para hacerlo es a través de las empresas prescriptoras que realizan las propias obras. En el caso de estas empresas del sector, es recomendable acudir a la comunidad de propietarios o asociación vecinal con un paquete cerrado: con el proyecto, la financiación o la cuota mensual por vecino.
via Expansión.com
