Found espera comercializar esta fuente de energía de bajas emisiones entre los consumidores de energía de la industria pesada
La empresa Found Energy, con sede en Boston, ha conseguido producir 2 kW de energía térmica continua a partir de hidrógeno en un reactor experimental que utiliza 1 kg de chatarra de aluminio como fuente de combustible.
La chatarra se trata con un catalizador patentado que hace que libere partículas de hidrógeno contenidas en un baño de agua, que pueden quemarse para obtener energía térmica o almacenarse en una pila de combustible
Una vez finalizada la reacción y disipados el calor y el hidrógeno, queda hidróxido de aluminio. El hidróxido de aluminio es un precursor químico de la alúmina que utilizan las fundiciones primarias para fabricar aluminio metálico puro.
Found espera comercializar esta fuente de energía de bajas emisiones entre los consumidores de energía de la industria pesada, como las fundiciones de aluminio, los camiones de larga distancia y los transatlánticos, todos ellos alimentados con productos derivados del petróleo que dejan una huella de carbono mayor. El proceso de Found se centra en el uso de chatarra de aluminio difícil de reciclar, como el papel de aluminio o la zorba, subproducto de las trituradoras de automóviles.
El reactor, capaz de producir electricidad en el rango de los kilovatios, es sólo la oferta inicial de la empresa. Found tiene previsto empezar a probar en el tercer trimestre un modelo capaz de producir electricidad en el rango de los megavatios. El hogar medio estadounidense consumió 886 kWh de electricidad al mes en 2021, según la Administración de Información Energética de Estados Unidos.
GH Power, con sede en Canadá, también ha estado trabajando en su propio reactor de chatarra de aluminio e hidrógeno. La empresa ha prometido construir al menos seis reactores para finales de 2025, todos ellos de entre 1 y 60 MW, según una presentación de diapositivas del año pasado.
GH no ha facilitado a Argus información actualizada sobre las operaciones a tiempo para su publicación.
Aunque la producción de hidrógeno gaseoso a partir de chatarra de aluminio se lleva intentando desde hace décadas en el ámbito de la investigación, los avances en el mantenimiento de la reacción y el reciclaje de catalizadores para su reutilización han sido los factores que han limitado las aplicaciones comerciales, según explicó a Argus un consultor del sector.
Noticia de https://www.worldenergytrade.com/